Este fin de semana, el Ayuntamiento de Barcelona ha inaugurado la reforma de la Via Laietana con una fiesta llena de actividades familiares, música, talleres y mucho más. Bienvenido sea que las obras hayan finalizado, pero la controversia que han generado continúa abierta, con opiniones destacadas y relevantes en contra.

Desde el Gremio del Motor nos hemos sumado a la denuncia por la pérdida de funcionalidad viaria de esta vía, junto con más de treinta entidades, muchas de las cuales forman parte de Mou-te por Barcelona. Esta plataforma está integrada por organizaciones empresariales de sectores muy diversos, pero también se han adherido vecinos de la zona, que destacan que la reforma ha convertido la vía en un bulevar sin salida, lo que puede provocar colapsos y perjuicios importantes para la movilidad local.

Previamente, se había dirigido una carta al alcalde y, a pesar de las múltiples reuniones mantenidas con su equipo, nuestras reivindicaciones no han sido escuchadas.

Cabe recordar que todavía hay varios contenciosos judiciales abiertos contra esta reforma, los cuales determinarán si la actuación del gobierno municipal ha sido adecuada. Hay que tener en cuenta que ya hay un precedente desfavorable en este ámbito.

Estamos en el año 2025, y aquella propuesta inicial —impulsada sin el consenso necesario y con oposición significativa— llega ahora a su culminación. Sin embargo, todo parece indicar que la polémica continuará presente durante los próximos años.