El passat dia 25 de setembre, el Consejo Europeo adoptó su posición sobre las emisiones de turismos, furgonetas, autobuses y camiones. Cabe destacar que la UE mantiene los límites de emisiones más bajos a nivel mundial y que la posición del Consejo es adoptada por los Ministros de Industria, actualmente bajo la presidencia española.
Este aplazamiento temporal de dos años de la propuesta es más sensata que el planteado inicialmente por la comisión europea. Va en buena línea si tenemos en cuenta el estrecho margen de maniobra temporal de los fabricantes de vehículos.
Anfac estima que el coste añadido por unidad es de tres mil euros en vehículos comerciales ligeros y once mil en los vehículos comerciales los pesados. El motivo es que cada marca debe revisar los modelos que produce, lo que supone añadir costes de implementación tecnológica, rediseño, homologación, macetas y la carga burocrática que conlleva.
Actualmente, las marcas están invirtiendo y preparándose para conseguir los compromisos de descarbonización previstos para el año 2035 de cero emisiones y que la adecuación a la normativa europea supone una inversión adicional.
En fin, es una decisión mucho más sensata y equilibrada que la que planteaba inicialmente la comisión europea, con tan poco margen temporal.