En el sector de la automoción se nos complican las cosas. La crisis de los semiconductores ha frenado su actividad fabril y comercial por las demoras en los plazos de entrega.Las existencias de vehículos tienden a agotarse y los usuarios deben esperar mesespara recibir el coche que desean.
El Gobierno español ha vetado la enmienda propuesta por el PDeCAT para prorrogar un año más los tipos impositivos vigentes hasta final de año. De este modo, se ha dado un varapalo más al comunicar la subida del impuesto de matriculación, una medida que entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2022. La noticia no ha tenido buena acogida, puesto que se asocia a un encarecimiento del precio de los coches.
Al respecto, la ministra de Hacienda María Jesús Montero ha comunicado que la congelación tiene los días contados y, una vez aprobado el nuevo presupuesto de 2022, las tasas y los tramos correspondientes empezarán a aplicarse. Así pues, a partir del 1 de enero de 2022, la cosa cambiará y el impuesto de matriculación girará en torno a los siguientes porcentajes:
- Hasta 120 g/km de CO2: 0%
- Entre 121 y 159 g/km de CO2: 4,75%
- Entre 160 y 199 g/km de CO2: 9,75%
- Por encima de 200 g/km de CO2: 14,75%
Lo que parece evidente es que en las últimas semanas del año constituyen la última oportunidad para aplicar los tipos vigentes.